
El turismo de lujo no es solo sinónimo de hoteles cinco estrellas o cenas gourmet. Es una experiencia que combina exclusividad, personalización y atención al detalle. Para las agencias de turismo, este segmento representa una oportunidad única de captar a un público dispuesto a invertir en experiencias memorables. Pero, ¿cómo diseñar paquetes que no solo cumplan, sino que superen las expectativas de los viajeros más exigentes?