Ese lugar fue inaugurado por la jefa del Estado el 25 de mayo último en el marco de los festejos del Bicentenario acompañada por su esposo, que desde que abandonó el poder sólo retornó en contadas ocasiones a la sede del Ejecutivo Nacional.
Ningún funcionario de primer nivel estuvo en la Rosada durante la jornada. El secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli, y el jefe de la Casa Militar, coronel Alejandro Graham, se instalaron en el sector militar del aeroparque metropolitano para coordinar la salida de los vuelos que llevaban a El Calafate a familiares y allegados al matrimonio presidencial.
Parrilli debió organizar también de urgencia el retorno al país desde Nueva York de Florencia Kirchner y que arribará a Buenos Aires a las 3 de la mañana.
Aunque recién por la noche finalizarán los preparativos para el velatorio, se adelantó que "sólo la cámara oficial" estará autorizada para ingresar al lugar y "no se permitirán móviles de canales ni radios".
De todas maneras, a fin de facilitar los preparativos y las medidas de seguridad, la Casa de Gobierno quedará a partir de las 20 vacía de toda persona ajena a la organización.
Mañana a partir de las 10, el féretro de Kirchner estará expuesto al público en general en el Salón que da a la puerta de Balcarce 50, aunque no se confirmó hasta qué hora se podrá ingresar.
Los funcionarios más importantes ingresarán por la explanada. Esta es la puerta que usarán los presidentes que vendrán a presentar sus respetos a Kirchner: por ahora confirmaron su asistencia Hugo Chávez de Venezuela, Rafael Correa de Ecuador, José Mujica de Uruguay, y Luiz Inacio Lula Da Silva de Brasil.