Axel Kicillof, gobernador de la provincia de Buenos Aires, inauguró este miércoles el 153° período de Sesiones Ordinarias de la Legislatura provincial con un fuerte discurso en contra del gobierno nacional y del presidente. En sus declaraciones, Kicillof subrayó que el modelo del Ejecutivo nacional, liderado por el presidente, no solo amenaza la estabilidad económica, sino que busca una “desintegración” del Estado, afectando así la estructura social y productiva de la provincia.
“No voy a permitir que el destino de los bonaerenses quede librado a la prepotencia de un presidente que no respeta la democracia”, destacó Kicillof, refiriéndose a recientes amenazas del presidente de intervenir la provincia y de utilizar redes sociales para intentar desplazarlo de su cargo.
En su discurso, el gobernador enfatizó que el gobierno de la provincia actúa como un “escudo” para proteger los derechos de los ciudadanos y mitigar los daños causados por las políticas nacionales. “Frente a la motosierra y al ajuste, mostramos con hechos que hay alternativas”, afirmó, refiriéndose a las políticas del gobierno nacional.
Respecto a la seguridad, el gobernador destacó la necesidad de políticas efectivas más allá de los discursos de campaña. Anunció que se destinarán $170.000 millones para mejorar la seguridad en la provincia, lo que incluirá la incorporación de 800 nuevos patrulleros, la creación de un Fondo Municipal de $70.000 millones para distritos de más de 70.000 habitantes y la instalación de 15 nuevas bases en los barrios para mejorar la prevención y protección.
En cuanto a la educación, Kicillof aseguró que, a pesar de las dificultades, la educación pública seguirá siendo una prioridad para su gobierno, y anunció la inauguración de 50 nuevas escuelas durante el año. “Estas no se construyen con motosierra, sino con trabajo”, sostuvo el mandatario provincial.
En lo relacionado a salud, destacó el esfuerzo del gobierno provincial por mejorar el acceso y la infraestructura sanitaria, mencionando la apertura de 175 centros de atención primaria, la entrega de 342 ambulancias y la puesta en marcha de cuatro grandes hospitales. Además, solicitó la pronta aprobación de leyes para la creación de la Empresa Pública de Emergencias y la Ley de Medicamentos Bonaerenses, que facilitará el acceso a medicamentos esenciales.
El gobernador también se refirió a la obra pública, que, según su visión, debe seguir adelante para garantizar justicia social, dignidad y desarrollo. Criticó la falta de progreso en obras federales, como rutas y viviendas, y exigió al gobierno nacional que finalice los proyectos que tiene a medio hacer.
Por otro lado, Kicillof solicitó a la Legislatura que apruebe leyes clave para la planificación financiera de la provincia y urgió por la resolución de la incertidumbre electoral generada por el presidente, pidiendo la suspensión de las PASO dada la crisis económica y política que atraviesa el país.
Por último, el gobernador hizo un llamado a la unidad y cooperación de todas las fuerzas políticas para defender la democracia, los Derechos Humanos y la convivencia pacífica. “El futuro no es del presidente, es del pueblo”, concluyó con firmeza, reafirmando su compromiso de seguir trabajando por un futuro mejor para todos los bonaerenses.
En el evento estuvieron presentes la vicegobernadora Verónica Magario, el presidente de la Cámara de Diputados bonaerense Alexis Guerrera, integrantes del gabinete provincial, y legisladores y funcionarios de distintas fuerzas políticas.