Todo comenzó cuando un vecino de un edificio de la Calle Guareschi denunció el hecho a las autoridades.
Inmediatamente acudieron los móviles policiales al lugar y los efectivos presenciaron el momento en el que los sospechosos intentaban huir, al intentar arrestarlos uno de los delincuentes arroja gas pimienta sobre uno de los agentes y salen corriendo por la calle España.
Tras perseguirlos durante algunas cuadras, los agentes lograron interceptar a los sujetos y detenerlos. Como resultado se recuperaron los objetos sustraídos durante el robo.