Tres custodios de la empresa Brinks, luego de retirar dinero del local recaudador de la cadena Pago Fácil situado en el predio, fueron sorprendidos por siete individuos armados con sus rostros cubiertos cuando caminaban por la galería del hipermercado.
Los delincuentes estaban vestidos con prendas camufladas de color verde y marrón con chalecos posiblemente antibalas, teniendo todos sus rostros cubiertos con pasamontañas.
Los asaltantes se apropiaron de dos sacas con una importante cantidad de dinero, maniataron a los custodios, les robaron sus pistolas marca Browning calibre 9 milímetros y escaparon en dos camionetas, una de las cuales era una Fiat Ducato con dos patentes distintas que fue encontrada minutos más tarde.
Justamente, los empleados del camión de caudales se vieron superados en cantidad de personas, entregaron el dinero y no ofrecieron resistencia, lo que fue fundamental para que no se produzca un tiroteo y haya personas heridas.
La investigación quedó a cargo de la DDI Avellaneda y la Jefatura Departamental Lanús, quienes ya empezaron a tomarle declaración a los testigos.
El asalto se produjo a metros de donde el 29 de pasado hubo un tiroteo en el playón de una estación de servicio Shell ubicada dentro del mismo predio del Walmart y el Alto Avellaneda Shopping, donde agentes de la Policía Federal se enfrentaron con otros de la Bonaerense que habían ido a cobrar una coima.
En aquella oportunidad un comisario de la Bonaerense terminó muerto y dos oficiales federales gravemente heridos.
En el caso tomó intervención la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) número 3 descentralizada de Avellaneda, que depende del Departamento Judicial de Lomas de Zamora.
