Personal policial que patrullaba por el lugar advirtió cerca de la ventana de una de las oficinas un artefacto sospechoso.
Al acercarse, notó que se trataba de un caño color verde con apariencia sospechosa de explosivo.
En el lugar se montó un operativo con la brigada de explosivos de la policía bonaerense, cuyos expertos trasladaron el artefacto a un predio lindero y allí realizaron una detonación controlada en horas de la mañana.
"Estamos investigando. No sabemos aún quién era el destinatario de la bomba. Estamos consultando con los fiscales de esa UFI qué causas en trámite tienen y si habían recibido en los últimos tiempos algún tipo de amenaza", dijo a Télam una fuente judicial que participa de la investigación.
Al tratarse de un explosivo, la causa es de competencia federal, por lo que la investigación es dirigida por el juez federal 2 de San Isidro, Lino Mirabelli.
La UFI de Boulogne cuenta con dos fiscales del departamento judicial San Isidro, Sergio Szyldergemejn y Facundo Osores Soler, quienes tienen competencia todo el año con los hechos de competencia penal ordinaria en jurisdicción en esa zona de San Isidro.