Ese convenio prevé un auxilio financiero de US$ 50.000 millones, con un primer desembolso del 30% a partir del 20 de junio, a cambio de un fuerte ajuste en las cuentas públicas para bajar drásticamente el déficit.
Sólo en mayo, la devaluación de la moneda nacional superó el 22%, y acumula en un año una depreciación del 63,5% que trepa al 87,9% en dos años.
De este modo, entre el viernes -un día después del anuncio de acuerdo con el Fondo- y lunes, la moneda norteamericana acumuló un alza de 86 centavos.
Según un promedio publicado por la autoridad monetaria, la divisa cerró a $25,46 para la punta compradora y a $26,44 para la vendedora, lo cual representó un nivel récord.
De acuerdo con el promedio del Central, el billete arrancó la rueda a $24,97 comprador y $25,93 vendedor, trepando a las 13:00 a $25 y $25,96 para las dos puntas antes de llegar al cierre récord.
Las carteleras de los bancos ofrecieron una fuerte dispersión de precios: el Banco Galicia lo vendió a $26,80 -uno de los más altos- seguido por el Industrial a $26,75 y el Itaú y Patagonia, a $26,50.
El Banco Nación, que también suele tener intervención en el mercado cambiario, ofreció el billete norteamericano a $26,47 para el tipo vendedor.
Operadores vincularon la suba con una oferta muy debilitada, que sólo es asistida por algunos bancos oficiales que salieron a ofrecer billetes para frenar la tendencia alcista.
En el Mercado Único y Libre de Cambios (MULC), el billete registró un alza de 69 centavos y cotizó al cierre a $26 en una jornada con poco volumen de negocios que llegó a US$ 528 millones, con una caída de 22%.
En el mercado de futuros del Rofex se negociaron US$ 737 millones y más del 70% se pactó entre junio y agosto, con valores de entre $26,40 y $27,617.
En el mercado paralelo, el dólar registró una suba de 0,38%, a $25,50 comprador $ 26,30 vendedor.