Los precios de las naftas y el gasoil se mueven por tres factores: el valor internacional del petróleo; los movimientos del tipo de cambio; y el valor del bioetanol con el que se cortan al 12% en la actualidad.
El último incremento en los precios de la nafta y el gasoil se había registrado el 7 de febrero cuando la empresa Shell ajustó un 3,5% sus valores de venta al público, completando una zaga iniciada por el resto de las compañías.
Desde ese momento, el precio internacional del crudo aumentó un 3,4% al pasar de 63,11 dólares el barril a 65,25 dólares; y el valor del dólar, en tanto, registró un alza del 2,66% al subir de 19,95 pesos a 20,48 pesos.
Ahora, Aranguren oficializó los incrementos para el precio del bioetanol que ya se habían aplicado desde octubre y estableció nuevas subas a ser puestas en marcha a partir del 1 de próximo mes.
El funcionario estableció así que la variación del precio de adquisición del bioetanol que regirá hasta el 31 de marzo se limitará a un máximo de 7,5% para el producto elaborado a partir de caña de azúcar y de 10,5% para el elaborado a partir de maíz, ambos respecto del nivel vigente en octubre de 2017.
Por ello, el precio de adquisición del litro de bioetanol es de 15,608 pesos para el elaborado a partir de caña de azúcar y de 12,193 pesos para el elaborado a partir de maíz.
Además, Aranguren estableció que la variación del precio de adquisición del bioetanol elaborado a partir de caña de azúcar que regirá dese el 1 de abril será del 3,54% respecto del precio del bioetanol vigente en marzo de 2018, por lo que subirá a 16,161 pesos.
Asimismo, dispuso que la variación del precio de adquisición del bioetanol elaborado a partir de maíz que regirá desde abril será del 7,96% respecto del precio del bioetanol vigente en marzo, por lo que el litro ascenderá a 13,164 pesos.
El funcionario consideró que los incrementos son calculados para que los productores tengan la oportunidad de obtener ingresos suficientes para satisfacer todos los costos operativos razonables aplicables a la producción, impuestos, amortizaciones y una rentabilidad razonable similar a la de otras actividades de riesgo equiparable.