La contundencia del resultado se debió al sorpresivo apoyo del Frente para la Victoria, más allá del previsible acompañamiento de las bancadas de Argentina Federal y el Frente Renovador.
El diputado massista Marco Lavagna explicó que el voto positivo tenía que ver con no contribuir al “desfinanciamiento del Estado”, pero aclaró que el impuesto a los débitos y créditos bancarios, más conocido como el “impuesto al cheque”, es un “mal impuesto” que se creó por motivos de “emergencia” económica en plena crisis del 2001 y que luego se “enquistó en el sistema tributario”.
La iniciativa, que ahora deberá ser tratada en el Senado, logró la media sanción en la última sesión del año en la Cámara baja tras un maratónico debate que también incluyó la aprobación de las leyes de Presupuesto 2018, Responsabilidad Fiscal, y Consenso Fiscal.