La nueva fórmula contempla en un 70 por ciento la variación de precios al consumidor que elabora mes a mes el INDEC, y en un 30 por ciento la evolución salarial por índice RIPTE.
Además, el ajuste de los haberes pasará a ser trimestral y no semestral como sucede con el método vigente.
"Existen mejores prácticas que utilizan otros países para dar previsibilidad y asegurar, mantener y mejorar la capacidad de compra de los jubilados", señala un borrador que hizo circular el Gobierno, que hace hincapié en que las modificaciones fueron consensuadas entre el Gobierno y representantes de las provincias en el marco de un pacto fiscal firmado en noviembre.
El texto señala que el sistema propuesto "garantiza una mejora en la capacidad de compra de los jubilados" y detalla que "El Poder Ejecutivo Nacional estima un crecimiento del poder adquisitivo de los haberes de aproximadamente 5% en el transcurso de 2018" y de "aproximadamente 2% adicional en 2019".
También apunta que en 2017 la "recuperación real" de los haberes en 2017 es del 2,9%.