Luego de pedir identificación, los uniformados detectaron el armamento de los sospechosos y el pedido de captura de la moto, por lo que se procedió a detenerlos.
Los “motochorros” de 25 y 26 años además de circular con la moto con pedido de secuestro activo por robo, poseían dos armas de fuego, un revolver calibre 22 y una ametralladora calibre 22.
Además de tener estas armas con todas sus municiones intactas, guardaban otros dos cartuchos y más 80 municiones de distintos calibres.
Interviene en el hecho la UFI de Investigaciones Delitos Complejos de San Fernando, a cargo de Alejandro Musso, quien avaló el procedimiento y aprehensión de las dos personas acusadas de los delitos de “tenencia de arma de fuego de uso civil, tenencia de munición de guerra, y encubrimiento”.