Energía procuró mediante el comunicado precisar el criterio que seguirá respecto del precio del GNC en el marco de la política tarifaria en desarrollo, tema que motivó la inquietud entre los expendedores de este combustible y también en los fabricantes de equipos de GNC, cuya industria cobró impulso desde la década del noventa.
Al respecto, Energía argumentó que “la situación actual del mercado de gas natural es muy diferente a la que existía al inicio del uso del GNC como combustible automotor, ya que en aquel momento el gas natural era abundante, barato y se exportaba, y hoy es escaso, caro y se importa hasta el 30 por ciento de la demanda en los días de invierno”.
En este contexto, el Ministerio detalló que Aranguren “si dijo, que el precio de los combustibles sustitutos deben tener en cuenta el costo diferencial de producción (determinado por el precio de los insumos que lo constituyen), de elaboración y de transporte, el mayor o menor impacto ambiental que su combustión genera, y el nivel de carga impositiva que los distintos combustibles sobrellevan”. Energía puntualizó que “el sector del GNC atraviesa una situación de transición como el resto de los sectores vinculados a la energía, que en la última década estuvo fuertemente subsidiada en nuestro país”.
“No obstante, agregó el Ministerio, tenemos confianza en que el GNC encontrará su participación de equilibrio en la oferta energética local y generaremos las condiciones para el desarrollo sostenible del sector vinculado al GNC en nuestro país”.
Energía afirmó que reconoce “el importante desarrollo del Gas Natural Comprimido en Argentina” y que “nuestro país es uno de los líderes mundiales en el sector y ha sido exportador de tecnología y modelo de desarrollo”.