La búsqueda es una carrera contrarreloj por la amenaza de un empeoramiento de las condiciones meteorológicas.
"El barco sigue situado en una posición insegura", explicó el vocero Luca Cari a la agencia alemana de noticias DPA. En ese marco, añadió: "Los buzos tienen que ser muy cautelosos. Cualquier desplazamiento supone un peligro y nosotros tendremos que suspender de nuevo las operaciones".
Según un comunicado oficial de la empresa Costa Cruceros, hasta hoy suman 12 las personas muertas y 21 las desaparecidas. La embarcación de lujo, de 290 metros de largo y con más de 4.200 personas a bordo, encalló en unas rocas el viernes último al modificar el capitán el rumbo ante la isla Giglio.
Otro de los problemas que enfrentan las autoridades italianas es la extracción del fuel oil que sigue en los depósitos del barco y que previsiblemente duraría varias semanas. Según la naviera, hay 1.900 toneladas de combustible a bordo, así como aceite pesado, que para ser bombeado hay que calentarlo de 45 a 50 grados.
Los 21 tanques del "Costa Concordia" pueden albergar hasta 2.400 toneladas de combustible.
