El Municipio de San Isidro intensificó los operativos de control de tránsito en calles y avenidas, tras la suspensión temporal del sistema de fotomultas, dispuesta por decreto del intendente Ramón Lanús.
La medida responde a la necesidad de garantizar la seguridad vial en un contexto donde se detectaron presuntas irregularidades en los convenios firmados en 2020 y 2022 con universidades públicas y empresas privadas para la ejecución del sistema de fotomultas. Según se informó oficialmente, el objetivo es garantizar que el sistema se ajuste a la normativa vigente y no tenga fines recaudatorios.
Mientras dure la suspensión, el Cuerpo de Agentes de Tránsito, recientemente reforzado con 50 nuevos egresados y nuevo equipamiento, lleva adelante operativos fijos y rotativos de fiscalización para controlar el cumplimiento de los límites de velocidad, el respeto a los semáforos y los cruces peatonales, tanto en avenidas principales como en calles secundarias y accesos al distrito.
Los controles se realizan de lunes a domingo en tres turnos diurnos, y también se suman puestos nocturnos de alcoholemia, todos debidamente señalizados y con cartelería de advertencia para los conductores.
En paralelo, el Municipio incorporó nuevos vehículos para mejorar la logística y la cobertura territorial: seis camionetas Kangoo, 20 motos para una unidad específica motorizada, tres camionetas Toyota Hiace para movilidad del equipo y dos grúas especiales.
Desde la Subsecretaría de Movilidad de San Isidro destacaron que la política de seguridad vial se aborda de forma integral, mediante tres ejes principales: infraestructura segura (nuevos reductores de velocidad y demarcaciones en avenidas), educación y concientización (charlas en escuelas secundarias y capacitaciones a choferes de colectivos), y fiscalización activa a través del cuerpo de agentes de tránsito.
