Según las estadísticas brindadas por el propio Colegio de Farmacéuticos, la envergadura y la capacidad de presión de la megaempresa de Quintana genera una competencia desleal, que sumado a la falta de controles determinan que en el sector por cada una de estas sucursales de la cadena que se instala en el territorio, cierran diez farmacias barriales.
"Tigre será otro de los distritos que le presentará batalla a Farmacity, y los Concejales tiene la gran responsabilidad de ser quienes decidan si permiten que el poder venza, o si por el contrario triunfa la justicia y las oportunidades de trabajo para todos", destaca un comunicado de Unidad Ciudadana.