La cuestión de las tarifas, la corrida cambiaria y el pedido de asistencia financiera al Fondo Monetario Internacional (FMI) obligaron al líder del PRO a volver a las fuentes, es decir, a incluir nuevamente dentro de su "mesa chica" a dirigentes de la UCR y la Coalición Cívica-ARI, los socios en Cambiemos.
Las críticas de los aliados que fueron desoídas puertas adentro y tuvieron repercusión afuera de la alianza gobernante fueron uno de los principales motivos que llevaron a Macri a darle mayor peso político al grupo de los más allegados.
"Tenemos que ser todos un poquitos más escuchados, sobre todo aquellos que no molestamos nunca. Cuando hace dos meses llamé, era por algo. Me gustaría ser escuchada, sinceramente, en el momento oportuno y no cuando es tarde. Le avisé lo que intuía que podía pasar con el aumento de tarifas", se había quejado la líder de la Coalición Cívica-ARI, Elisa Carrió.
La ideóloga de Cambiemos también había endurecido sus críticas al asesor ecuatoriano Jaime Durán Barba: "Cambiemos tiene que salir a dar las razones y explicarle a la sociedad y no no hacerle caso al teñido, porque sino nuestra sociedad no entiende lo que pasa. El otro quiere que seamos todos buenitos y juguemos con los globos. Basta de ser buenitos, basta con los globos.
Ante ese panorama, el Presidente decidió dotar de mayor caudal político a su mesa chica, para equilibrar el denominado "dúo Excel", como describen algunos en la Casa Rosada a los secretarios de Coordinación Interministerial, Mario Quintana, y de Coordinación de Políticas Públicas, Gustavo Lopetegui.
En ese contexto se enmarcan los recientes "reingresos" de Frigerio y Monzó, así como también el de Sanz -quien se había alejado de la vida política- y la futura aparición de Fernando Sánchez en ese cercano grupo.
"Me alegro de que esté de vuelta en la política, porque es una mirada y una operación valiosa para la Argentina", remarcó el presidente provisional del Senado, Federico Pinedo, respecto de la decisión de volver a sumar a Monzó a la mesa de decisiones.
En ese sentido, el legislador afirmó que "la política es juntar voluntades, tener diálogo, generar confianza para tener colaboración".
Dentro de este nuevo reacomodamiento, el jefe de Estado encabezó este martes una reunión con referentes de Cambiemos como los senadores nacionales Luis Naidenoff y Ángel Rozas y el diputado nacional Mario Negri, además de Monzó y Pinedo.