Instantes después, al requisar el auto (un Peugeot 307 de color negro) en el que se movilizaba, personal de la división Explosivos halló una escopeta “tumbera” (un arma casera) y cinco cartuchos listos para ser utilizados.
Según trascendió, el agresor, que quedó detenido en la delegación San Isidro de la Policía Federal, es un argentino de 33 años que reside en Boulgone y que trabaja como empleado en una empresa avícola.
La causa está caratulada como “averiguación de delito por tenencia de arma de guerra” y fue radicada en el Juzgado Federal número 2 de San Isidro, a cargo de la jueza Sandra Arroyo Salgado.