El ministro de Educación, Gabriel Sánchez Zinny, y de Trabajo, Marcelo Villegas, junto al de Economía, Hernan Lacunza vienen realizando una serie de reuniones sobre temas en los cuales es más fácil ponerse de acuerdo, como en materia de higiene y edilicias de las escuelas.
Y si bien sobre el punto salarial aún no han empezado las negociaciones, desde el gobierno esperan llegar a un acuerdo antes de fin de año para poder programar bien el año lectivo; principalmente "los chicos y sus familias para que puedan tener certidumbre sobre el inicio de las clases", remarcan los funcionarios.
"La cláusula gatillo puede ser una herramienta. Fue muy útil este año; y la ventaja que tenemos respecto del anterior es que ganamos en credibilidad porque se aplicó cada trimestre en que la inflación fue superior a la prevista, no sólo con los docentes, sino también con el resto de los gremios", dijo optimista el ministro de Economía bonaerense días pasados.
La provincia cerró a mitad de este año un acuerdo con los docentes al realizar un incremento salarial de 21,5%, con "cláusula gatillo", más un bono de 1.600 pesos por cada cargo; también, una compensación del 2,5% correspondiente a 2016 y las sumas ya adelantadas a cuenta del aumento, de entre 2.500 y 4.500 pesos. Los dirigentes docentes estimaron el aumento conseguido del orden del 27,5 %.