Señala la información que “en un rápido y eficiente operativo articulado desde el Municipio con las fuerzas de seguridad, se procedió primero a evacuar del edificio a la totalidad de los alumnos, docentes, auxiliares y directivos del turno noche. En apenas unos minutos se encontró una granada debajo de uno de los pupitres que utilizan los alumnos.
“Finalmente, personal de la División Explosivos, con autorización del Juzgado Federal de San Isidro, retiró el artefacto de la escuela y lo hizo detonar en la plaza cercana dentro de un pozo con protectores, tal las medidas de protocolo que se implementan en este tipo de episodios”.
Se explicó además que el intendente Ariel Sujarchuk siguió “minuto a minuto el procedimiento” y se comunicó con las máximas autoridades nacionales y provinciales en materia de seguridad, reclamando “que se investigue hasta las últimas consecuencias quién está detrás de esta clara demostración de intimidación pública de extrema peligrosidad para la comunidad de Escobar”.
Al mismo tiempo, el jefe comunal exigió a los funcionarios responsables de la seguridad que “se tomen todas las medidas necesarias para que no se vuelva a repetir un hecho de tal gravedad”.