Por otro lado, del total de personas que desarrollaron una dependencia a la cocaína, el 2% son niños y adolescentes.
Además, un tercio de los adolescentes entrevistados para elaborar el estudio considera que le sería fácil conseguir cocaína en el lapso de 24 horas, dos de cada 10 la probaría si se presenta la ocasión, y la cuarta parte tiene dos o más amigos que consumen drogas.
Pero un 44% de las personas de cualquier edad que buscaron tratamiento en el último año no tuvieron acceso al mismo, un déficit que es más marcado entre las mujeres (67%) que entre los varones (44,2%), de acuerdo al trabajo presentado por la Sedronar.
Mi hijo tiene problemas de adicciones desde los 9 años y ese fue uno de los motivos por los que yo había pedido la internación pero me dijeron que no hay centros de rehabilitación para niños de esa edad, son a partir de los 16, dijo en una entrevista reciente Fernanda Rivas, la madre del niño de 11 años conocido como El Polaquito que se hizo conocido por una entrevista en el programa de TV Periodismo para Todos.
Los dichos de Fernanda fueron refrendados por Nicolás Caropresi, referente de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP) que trabaja con cooperativas integradas por cartoneros y abocado a la problemática de las adicciones.
Nosotros venimos trabajando con situaciones de ese estilo todos los días, porque el principal problema que tenemos en los barrios es que mientras avanzan los kiosquitos de paco, cada vez que intentamos avanzar en un proceso de internación porque el mismo pibe nos lo pide, no hay ningún dispositivo estatal para contenerlo, contó a Télam.
El subsecretario de Prevención y Tratamiento de la Sedronar, Roberto Camay, negó que no existan centros residenciales para menores de 16 años, aunque reconoció deficiencias en la oferta en todo el país.
Hay centros de rehabilitación pero tanto en relación a niños y niñas como a mujeres en general es donde existen las mayores deficiencias en todo el país, dijo a Télam.
Ante esta situación, el organismo oficial se encuentra trabajando en este tema contemplando un pago diferencial para las instituciones (privadas u ONG) que se abocan a estas poblaciones, capacitando en estrategias de tratamiento e intervención temprana; y estimulando la ampliación o creación de nuevos centros de atención para estas poblaciones.
No obstante, en muchos casos tendemos a poner la 'droga' en el centro de la escena y a pensar en la internación como 'la solución'; cuando no podemos perder de vista que estamos frente a situaciones muy complejas, que requieren abordajes integrales, afirmó Verónica Brasesco, directora del Observatorio Argentino de Drogas, dependiente de la Sedronar.
En el marco de este abordaje integral que incluye también la prevención se enmarcan otros programas de la Sedronar que también trabajan con adolescentes, como los Dispositivos Integrales de Abordaje Territorial (DIAT), las Casas de Atención y Acompañamiento Comunitario (CAAC) y el Centro de Contención, Orientación y Derivación (Cedecor).
El presidente de la Federación de Organizaciones no Gubernamentales de Argentina para la Prevención y el Tratamiento de Abuso de Drogas (Fonga), Fabián Chiosso, aseguró que las dificultades de los menores de 16 años para acceder a un tratamiento residencial pasan más por la negativa de los profesionales de la salud mental a firmar órdenes de internación a raíz de la nueva Ley de Salud Mental inmersa en el paradigma de la desmanicomialización.
Centros de rehabilitación hay y muchos están trabajando muy bien, pero determinada lectura de la ley de salud mental impide muchas de las internaciones necesarias de adolescentes y niños en programas terapéuticos porque se lo confunde con encierro y se ha instalado que los tratamientos residenciales son violatorios de los derechos humanos, lo cual es absolutamente falso, dijo.
Chiosso señaló que además no hay una normativa para la habilitación y supervisión de instituciones de tratamiento de salud mental y adicciones desde que en julio del año pasado se derogó la resolución 1484/2015 de la cartera de Salud y se dispuso la creación de una comisión ad hoc para elaborar nuevas reglas.
Algo que vemos saludable es el trabajo que estamos haciendo con la Sedronar en la definición de estándares de calidad en el tratamiento de drogas: eso no se hizo nunca y en el corto plazo generará mejores condiciones de tratamiento para todos, concluyó.