La incertidumbre es "la peor antesala del infierno", agregó la mujer, según consignó la agencia de noticias DPA.
El fin de semana, cuando se cumplieron cien días de la desaparición de la menor en un complejo turístico en el Algarve, en el sur de Portugal, la policía admitió por primera vez que la pequeña podría estar muerta.
Amigos de los McCann criticaron el hecho de que la policía hiciera pública esta información sin comunicarla a los padres.
Mientras tanto, se esperan los resultados de las pruebas realizadas a los rastros de sangre hallados en la habitación donde la pequeña dormía antes de desaparecer, los que son considerados decisivos en este caso. (Télam)