El nuevo programa de servicios públicos iniciado en julio pasado, consiste en despejar y ordenar la vía pública, particularmente las veredas donde quedan depositados – responsabilidad de los frentistas – escombros, tierra, bolsones de arena y piedras, con la finalidad de remodelar o construir viviendas, pero por distintos motivos, esos bienes permanecen en el tiempo al alcance de todos, obstaculizando la libre circulación de peatones y opacando la imagen de calles y barrios.
El radio de trabajo alcanzado hasta el momento ronda el 35% de la localidad, tarea consensuada con charlas previas entre un agente municipal y los vecinos para definir qué hacer con los materiales mencionados; posteriormente actúan trabajadores de la Delegación Municipal de Rincón y de Higiene Urbana.
A la fecha, se trabajó en 394 frentes de domicilios, pero aún hay mucho por delante, aunque confiamos plenamente en que el resto de la comunidad se adhiera cuando lleguemos a las puertas de sus domicilios.