Sabor dijo que el gobierno porteño pretende “garantizar este servicio que beneficia a la gente” y por eso pide el “diálogo para llegar a una pronta solución”.
La semana pasada el jefe de Gobierno de la ciudad, Mauricio Macri, inauguró las nuevas estaciones Echeverría y Juan Manuel de Rosas por el cual la línea B llega hasta el barrio de Villa Urquiza.
Pero los metrodelegados se negaron a que el recorrido llegara hasta allí alegando razones de seguridad para los trabajadores y los pasajeros. De acuerdo con esas denuncias, existen en las nuevas estaciones filtraciones de agua que generarían riesgo eléctrico y además, denunciaron la falta de un sistema de comunicaciones que permita una eventual evacuación en caso de emergencia.
El subte funcionó el viernes manejados por personal jerárquico, pero no llegó a la terminal durante el fin de semana.