Luego de estas declaraciones, visitó el piso de "Infama" y aconsejó a los padres que cuiden a sus hijos, que los abracen y que no todo es comprarle un auto o un juguete. "Lo más importante para un hijo es la contención. Si trae una mala nota en el boletín, en vez de golpearlo que le digan que lo van a ayudar", sugirió.
Si bien dio a entender que el maltrato lo recibió de sus padres, no quiso acusarlos directamente. "Son mis viejos. Ellos tuvieron una vida asquerosa. Mi mamá a los 11 años limpiaba casas y mi viejo a los 8 años, en vez de jugar, trabajaba en un tambo", justificó. Y, a su vez, dijo que cuando conoció a Mary, su ex novia, encontró a una verdadera familia. "Las hermanas de Mary eran como mis hermanas. Sus padres eran como mis padres. Un día me senté a la mesa y me dije 'por primera vez tengo una familia'", recordó.
Finalmente, el ganador de una de las ediciones de "Gran Hermano" habló de un hecho que pudo llegar al abuso. "Fuimos a vivir a Avellaneda. Teníamos un perro, Bobby. A mi viejo se le ocurrió, para que no esté en la casa y para no regalarlo y seguir viéndolo, dárselo a un 'ciruja' que estaba cerca. Le daba la comida para él y para el perro. Íbamos siempre a jugar con Bobby. Pero un día se apareció el tipo en paños menores No sabía qué hacer Y le empecé a tirar cascotes. Lo fui a buscar a mi papá y casi lo mata", señaló.
Urrizaga debutará el próximo sábado junto a Marcela Baños al frente de "Pasión de Sábado", ciclo que conducía hasta hace algunas semanas Hernán Caire por América TV. (Reporter)