La entidad planteó que "resulta inadmisible justificar, por una inflación presunta del 25 por ciento, subas de hasta 433 por ciento en el impuesto inmobiliario", y consideró que "la verdadera razón de las subas" es la "necesidad creciente" del gobierno porteño "de ingresos para financiar un gasto público en aumento y con problemas crónicos de eficiencia".
La institución remarcó en un comunicado que "si bien las autoridades de la Ciudad sostienen que el alza promedio es del 23 por ciento, las subas están siendo muy superiores: en casi todos los comercios relevados superan el 50 por ciento".
Con el nuevo ajuste impositivo, estimó que en el 2013 "habrá propietarios e inquilinos de locales comerciales que estarán pagando hasta 8 veces más de lo que pagaban en 2011".
"Un local en Barrio Norte que pagaba $815 bimestrales en 2011 de ABL ($408 mensuales), pasó a pagar $1630 mensuales en 2012 y para 2013, la boleta llegó en $3.261. Así, este contribuyente en enero de 2013 estará abonando 700 por ciento más de lo que pagaba en diciembre de 2011", ejemplificó.
Came señaló que "en Buenos Aires los precios de las propiedades están completamente desfasados del ingreso mensual", por lo cual "cualquier comercio de barrio puede tener o alquilar un local valuado en 700 mil pesos". "Pagar 7.000 u $8.000 pesos al año de ese impuesto, le significaría destinar la ganancia, de casi un mes entero de trabajo, a ese fin", subrayó.