Godoy Cruz nunca pudo sostener el equilibrio en la mitad de la cancha y se vio obligado a aguantar, pese a que un golpe inesperado le posibilitó ponerse arriba en el marcador, pero ya en la segunda parte dos fallas muy notorias y muy seguidas lo condenaron a perder el partido y la cima, la que, de momento, quedó en poder de Estudiantes de La Plata e Independiente.
Godoy Cruz comenzó tratando de jugar de igual a igual, pero hacia los 10 diez minutos River se había hecho dueño de la pelota, trataba de ganar profundidad por los costados, en particular por la derecha, y contaba con Gustavo Canales pivoteando muy bien en el medio.
A los 10 minutos, luego de que Nelson Ibáñez rechazara un remate de Canales, Ortega en posición adelantada se aprestaba a convertir cuando le cometieron un claro penal, pero el árbitro Pablo Lunati pasó por alto las dos infracciones.
A los 17 hubo un cabezazo de Canales que resultó apenas desviado y después se observó una serie de positivas intervenciones del arquero mendocino Nelson Ibáñez por remates de Marcelo Gallardo, a los 21; Cristian Villagra, a los 23; Canales, a los 24, y Ortega, a los 26.
Así planteadas las acciones, el gol de River pareció cuestión de tiempo, pero sin embargo fue Godoy Cruz el que en su primer ataque a fondo convirtió en una maniobra en que el uruguayo Carlos Sánchez apareció muy libre por la derecha, tocó hacia el medio e Higuain, quien llegaba a la carrera, venció a Daniel Vega.
River pareció sentir el impacto y en lo que restaba de la etapa la única llegada le correspondió a Godoy Cruz, en el minuto 39, con un disparo de Nicolás Olmedo que con esfuerzo rechazó Vega.
La primera oportunidad del segundo período le correspondió a Godoy Cruz en el minuto 5. Debido a una mala salida de Alexis Ferrero, Olmedo habilitó a César Carranza por derecha y el envío cruzado se fue desviado.
Después volvió a ser todo de River, que ganó en movilidad con el ingreso de Buonanotte y precisamente el reaparecido zurdo en sus dos primeras intervenciones, a los 13 y a los 16, generó peligro, con un un remate que terminó en córner y otro sobre el travesaño.
Hasta entonces, a pesar de algunos sobresaltos, la defensa visitante se había mostrado firme, pero dos errores sucesivos, entre los 23 y los 25 minutos, le permitieron a River dar vuelta el partido.
Primero Pereyra elaboró una buena jugada personal sobre la izquierda, ingresó al área y atrajo a tres rivales, incluido el arquero Ibáñez, por lo que el toque del volante hacia adenttro encontró a Ortega frente al arco y sin oposición para establecer el empate.
Dos minutos más tarde, una pésima entrega hacia atrás de de Olmedo le permitió a Paulo Ferrari escaparse sin marca, eludir la salida del guardavalla y de zurda colocar el 2-1.
Obligado a atacar Godoy Cruz no supo cómo hacerlo y River continuó controlando el balón y la posición hasta conseguir la tan ansiada victoria.