En tanto, la precandidata de Juntos por el Cambio en ese conteo realizado por el Gobierno nacional obtenía 3.045.945 votos, es decir 32,56 por ciento del electorado provincial.
Sin embargo, a 18 días de las primarias la Junta Electoral de la Provincia de Buenos Aires obtuvo los resultados del escrutinio definitivo, el único que tiene validez legal y que incluye los sufragios de los electores extranjeros.
En ese conteo, según los datos a los que accedió Noticias Argentinas, el postulante opositor se alzó con 4.812.684 votos de ciudadanos argentinos y 108.852, de los extranjeros naturalizados: es decir, un total de 4.921.536 sufragios, por lo que quedó en 49,11 puntos.
Por su parte, la gobernadora quedó con 1.698.076 votos por detrás, con 3.223.460 de adhesiones en total (3.176.010 de argentinos, 47.450 extranjeros), y llegó a los 32,17 puntos.
Así, la diferencia porcentual terminó siendo de 16,94 puntos, mientras que la nominal ascendió a 1.698.076 votos.
Con estos números, se complicó un poco más el plan de reelección que encabezaba Vidal en la Provincia de Buenos Aires: el artículo 113 de la Ley electoral local establece que quien obtenga la "simple mayoría de los votos" será el triunfador en los comicios.
