El llamado recibido al sistema de alertas silenciosas informaba sobre un malviviente que escapaba en un Renault Clio del espacio deportivo donde había cometido un ilícito. Inmediatamente el sujeto cruzó el campo visual de las autoridades y dio comienzo una persecución que culminaría a la brevedad.
Luego de recorrer la calle Lavalle, cruzar el puente Sacriste y dirigirse a la Avenida Intendente Ricardo Ubieto, el ladrón cesó su marcha ante la voz de alto de los agentes. Tras identificarlo, se realizó la requisa del rodado, donde se halló la mochila robada, 6800 pesos en efectivo, una remera color gris, medias, un talonario de facturas, un perfume y un peine.
El vehículo fue secuestrado por falta de documentación, labrándose un acta de infracción, mientras que el ladrón fue trasladado a la dependencia de jurisdicción para ser puesto a disposición de la justicia.
Los datos brindados por el damnificado detallaban que el ladrón ingresó a una cancha de tenis a realizar consultas sobre clases, momento en el cual aprovechó para sustraer la mochila negra con una suma en efectivo y otras pertenencias. Además, varias personas en el lugar reconocieron al hombre y presenciaron cuando huyó en su automóvil.
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