Bajo el lema de “No queremos ni un policía muerto”, “Ni uno menos”, unos 350 manifestantes iniciaron su reclamo en Plaza de Mayo y de allí marcharon hacia el Congreso para pedir que la Justicia actúe con “el peso de la ley contra los delincuentes detenidos” y que la Policía “no quede desprotegida a la hora de combatir la delincuencia”.
Si bien la marcha central fue en Plaza de Mayo, también hubo manifestaciones menores en la Plaza Moreno de La Plata y en otras provincias, al tiempo que este viernes realizarán una movilización similar a las 17:00 en la Plaza de San Justo, partido de La Matanza.
En ese sentido, había familiares y retirados de Policía Federal, Policía Bonaerense, Gendarmería Nacional y Prefectura Naval, y también se sumaron efectivos en franco de servicio de las dos primeras fuerzas, aunque no eran muchos, ya que según contaron sus parientes “les advirtieron que si venían a la marcha los iban a sumariar”.
Con banderas, pancartas y remeras recordando a los policías muertos por hechos delictivos, en su mayoría estando de franco, marcharon a partir de las 16:00 hacia el Congreso, pidiendo ser recibidos por diputados o senadores y luego volvieron a Plaza de Mayo donde pidieron justicia por los fallecidos.
De la movilización también participaron los padres y la hermana de la oficial del Comando de Prevención Comunitaria (CPC) de Avellaneda María Belén González, quien el 29 e julio pasado fue atropellada tres veces por delincuentes que le robaron el arma reglamentaria y se recupera en el Instituto Fitz Roy del barrio porteño de Villa Crespo.
“Ella de a poco se está recuperando y la verdad que tiene mucha fuerza para poder salir adelante. Lo que le hicieron fue una canallada y todavía no los pudieron detener”, indicó a NA su padre Antonio González.
Alrededor de las 19:00 finalizó la protesta y se inició la desconcentración, aunque antes recordaron la convocatoria para el viernes.
