“Es claro que lamentablemente la inseguridad existe, pero a la indignación legítima se le suma la peor cara de la política, ya que los desmanes observados en Junín no son de modo alguno actos espontáneos sino organizados por sectores políticos intolerantes con quienes piensan distinto a ellos. Utilizan marginales para cometer esos actos de vandalismo” afirmó el intendente de San Isidro.
“En Junín dieron un paso más generando caos y temor afectando bienes que pertenecen a toda la comunidad. Es preciso que toda la dirigencia, más allá de sus diversos alineamientos políticos, manifiesten su repudio por este tipo de hechos delictivos”, expresó Posse.
El intendente sostuvo que hay que estar alerta para que este clima de intolerancia no avance vulnerando libertades y derechos individuales.