El presidente Luiz Lula da Silva viajó esta mañana hacia Recife, capital de Pernambuco, su estado natal, para visitar las zonas afectadas y anunciar ayudas económicas federales, consignó la agencia de noticias Ansa.
El ministro de Defensa, Nelson Jobim, comparó la devastación con los estragos causados en Puerto Príncipe, Haití, por el terremoto del 12 de enero pasado.
En la ciudad de Branquinha, estado de Alagoas, la alcaldesa Renata Moraes anunció que deberá construir en otro lugar la ciudad de 10.000 habitantes.
Moraes explicó que "es necesario reconstruir la ciudad en otro lugar, más alto par evitar la inundación".
El avance del agua destruyó los edificios públicos de la ciudad, por lo que las personas están durmiendo en el interior de ómnibus y automóviles.
Las tropas federales de la Fuerza Nacional de Seguridad debieron intervenir para impedir saqueos, ya que los comercios que quedaron en pie aumentaron un 1.000 por ciento los precios de alimentos y del agua mineral, según publicó el diario O Estado de San Pablo.(Télam).
