La legisladora explicó que "en los ambientes donde se dejaba una excepción y se dejaba que algunos fumaran, los empleados que trabajaban sirviendo café y comida se veían seriamente perjudicados, y además el que fumaba seguía perjudicando al que no fumaba".
"Está absolutamente comprobado con mediciones científicas y serias que el humo del tabaco ajeno, es decir el humo que otra persona está exhalando, perjudica a aquella persona que libremente eligió no fumar", agregó Bertol en declaraciones en la FM Mega 98.3 La semana pasada el Gobierno porteño y la Fundación Unión Internacional contra la Tuberculosis y Enfermedades Respiratorias (UICTER) comenzaron a trabajar en forma conjunta con el objetivo de convertir a Buenos Aires en una ciudad 100 por ciento libre de humo de tabaco
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El jefe del Gobierno porteño, Mauricio Macri, recibió a miembros de la Fundación para comenzar a delinear acciones tendientes a desalentar el consumo de tabaco.
"Nosotros apoyamos cualquier iniciativa que vaya contra el hábito de fumar porque científicamente está comprobado que el cigarrillo provoca daños en el organismo, muchas veces de modo irreversible", afirmó Macri días atrás.
El proyecto, financiado por UICTER, propone eliminar las excepciones en la prohibición de fumar en espacios cerrados públicos y privados de acceso público, a través de la reforma de la Ley 1799. "Debemos seguir concientizando a la población sobre los daños que provoca el cigarrillo como lo hizo Sandro antes de morir. Recordemos que se trata de una cuestión de salud pública y no de prácticas sociales, que quienes fuman no deben enfermar a quienes elijen no fumar", puntualizó Bertol.
Se estima que en la Argentina, el tabaco es responsable de más de 40 mil muertes cada año y de ellas, 6 mil corresponden a fumadores pasivos, personas que eligieron no fumar pero estuvieron expuestas al humo ambiental de tabaco.
