Voceros del caso dijeron a DyN que en la vivienda del arrestado se halló un revólver calibre 32 y se sospecha que pudo haber sido el arma homicida y que el joven podría ser el autor del disparo mortal.
"¿Hay un detenido?, que lo maten. Si no que me lo traigan que lo mato yo", dijo a la prensa visiblemente exaltada la esposa de Etcharrán, Vanesa Díaz (29), quien aseguró que su marido en ningún momento se resistió al robo.
"Lo único que hacen acá es hablar de los derechos humanos, de todas esta mierda... destruyeron una familia, me destruyeron a mi", se quejó con fastidio tras volver del entierro de su esposo.
El hecho ocurrió ayer, cuando el hombre, junto a su esposa Vanesa Díaz -quien el martes próximo tenía fecha para dar a luz- y el hijito de la pareja, de dos años, había ido a cenar a la casa de los suegros, situada en la calle Ramón Falcón 3521 de Ciudadela, partido de Tres de Febrero.
Poco después de la medianoche el matrimonio se disponía a volver a su domicilio en el Peugeot 206 de Etcharrán.
Al dar vuelta en la esquina fueron abordados por cuatro ladrones armados que se acercaron al vehículo, uno de los cuales gritó "alto", con intenciones de robo.
El empleado bancario aceleró el auto, tras lo cual uno de los asaltantes efectuó un disparo que traspasó el parabrisas y le dio en la cabeza.
El vehículo recorrió unos metros sin control hasta que chocó contra un cantero, mientras los ladrones se dieron a la fuga.
"Llegó mi hija con el nene en brazos en estado de nervios diciendo que le habían dado un tiro en la cabeza al esposo para robarle el auto", contó el suegro de la víctima, Rubén Díaz, al canal de noticias TN.
El hombre agregó que cuando su hija fue a buscarlo vio que "el coche estaba arriba de la vereda. Abro la puerta del acompañante y estaba Gonzalo en la butaca del conductor totalmente tirado hacia un costado, con convulsiones, vómitos y sangre en la cabeza. Me di cuenta de que el impacto era realmente grave".
Díaz sacó su auto del garaje y con ayuda de unos vecinos llevó a su yerno al hospital Ramón Carrillo de Tres de Febrero, pero cerca de las 4 el hombre murió.
En declaraciones a la prensa tras el sepelio, el suegro de la víctima formuló duros cuestionamientos a los jueces y el poder político y pidió que "alguien tenga los testículos o los ovarios bien puestos", para hacer un plebiscito "y que veamos si los argentinos quieren la pena de muerte".
"La venganza sería bárbara, para mí y para muchos argentinos..., después vemos una vieja con un pañuelo blanco rompiendo las pelotas defendiendo a un asesino", se quejó.
Poco después del crimen efectivos de la comisaría local aprehendieron por averiguación de antecedentes a cuatro jóvenes que se encontraban por la zona. Uno fue demorado y el resto quedó en libertad, por disposición de la fiscal de San Martín Fabiana Ruiz, a cargo del caso.
Se indicó que se trata de un joven de 19 años que -según la Policía- se sospecha que podría ser el autor del disparo.
Las fuentes policiales dijeron que el detenido es oriundo de la localidad de Ciudadela Sur y tiene varios antecedentes por robo cometidos en jurisdicción de Ciudadela Norte.
La fiscal dispuso que el joven sea sometido a ruedas de reconocimiento para determinar si tuvo participación en el hecho, para lo cual los principales testigos, por el momento, son los integrantes de un matrimonio que pasaba por el lugar ya que la esposa de la víctima no pudo declarar debido al profundo shock emocional que sufrió.
Las fuentes indicaron que los otros sospechosos tendrían entre 16 y 17 años.
El suegro de Etcharrán precisó que su hija está por dar a luz a una nena y ya tenía fecha de parto para el martes de la semana entrante a las 17.15.
El hombre fue velado esta tarde en una casa de sepelios del barrio porteño de Liniers y luego inhumado en el Cementerio Jardín de Paz de la localidad de Ituzaingó.
