Los dos ladrones aprovecharon la llegada de un empleado de 19 años a quien le abrieron la puerta para ingresar a la fábrica y reducir también a otro trabajador y una secretaria que estaban en el lugar.
En una oficina, los ladrones obligaron a la secretaria a entregarles todo el dinero que tenían guardado, unos 3.000 pesos, y una serie de cheques, según precisaron voceros policiales.
El robo no culminó allí, ya que el dueño de la fábrica llegó al lugar y también fue asaltado por los ladrones que le sacaron los 2.000 pesos que llevaba encima.
Durante el asalto, los dos empleados que estaban en la fábrica fueron golpeados por los delincuentes, que escaparon y hasta esta mañana no habían sido detenidos.
El caso es investigado por la comisaría tercera de Hurlingham y la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1 de Morón.