La yegua llamada Petisa y su potrillo Bandido -de unos 20 días de vida- ahora disfrutan de su libertad en el “Centro de Rescate y Rehabilitación Equino” (CRRC) donde tendrá una mejor vida y estará cuidado. Ello en línea con la Ordenanza que prohíbe la tracción a sangre en todo San Fernando, con el objetivo de recuperar a los caballos en un santuario y preservar el trabajo de quienes los usan como fuerza de tiro.