El concejal Joaquín Noya junto al diputado nacional Leonardo Grosso visitaron a los trabajadores de la fábrica recuperada y cooperativa BrassRoot de Munro, a quienes la Justicia les libró una orden de desalojo luego de 7 años de invertir, producir y hacer de la empresa su fuente de trabajo. Una fábrica de producción industrial bonaerense que la pandemia no la detuvo pero la Justicia ahora quiere cerrar.