Detalló, como un antecedente a esta iniciativa, que en muchas ciudades las consultas de las categorías B o C "ya no requerían bonos", y que también "se implementó la extracción de éstos por cajero".
“Estas experiencias sirvieron para que el Instituto ahora vaya por más, ya que con la innovadora modalidad , las demoras en las bocas de expendio se pueden llegar a reducir en un 80%", destacó La Scaleia.
Indicó además que ahora "todos los afiliados que necesiten consultar a un profesional pueden ir sin bono al médico que los atiende”.
El IOMA explicó que para las consultas médicas y la atención de urgencias en guardia el afiliado debe ir directamente al efector con la documentación habitual y, tras acceder al sistema, el acto queda registrado en una planilla que el profesional le hace firmar al paciente. En caso de que requiera una constancia para su copago, el profesional se la entregará allí mismo.
La obra social detalló, respecto a las prácticas, que el médico tendrá un listado de 20 prestaciones que representan más del 60 por ciento de las más utilizadas, que puede prescribir y autorizar en el mismo momento, y luego le entregará al afiliado la orden para ir a realizarla en el centro que él elija.
IOMA explicó lo único que requiere el sistema es una computadora y la conexión a Internet y permite no sólo la eliminación de los bonos, sino que facilita el trabajo profesional, con el registro de los pacientes atendidos y la información del mes correspondiente para su facturación.
La Scaleia destacó que “esto no implica que se elimine la boca de expendio, dado que algunas prácticas requieren autorización" y agregó: "lo mismo ocurre cuando un afiliado supera las tres consultas mensuales".