Los fiscales Carlos Argüero y Esteban Lombardo reunieron las pruebas para juzgarlos por los presuntos delitos de "fraude en perjuicio de la administración pública e incumplimiento de los deberes de funcionario público", explicaron las fuentes.
La causa se inició en abril de 2004 por una denuncia realizada por Mónica Carné en su carácter de jueza y presidenta del Tribunal Fiscal provincial y por entonces directora adjunta de Rentas.
En la denuncia se indicó que en el departamento de Cobro Prejudicial y Coactivo del organismo recaudador, entre noviembre de 2003 y abril de 2004, se habrían emitido y cancelado títulos ejecutivos referentes a deudas que distintos contribuyentes tenían en concepto de ingresos brutos, inmobiliario y patente de automotores.
Los fiscales sospechan que los ex empleados emitían y cancelaban el título ejecutivo, en la mayoría de los casos en el mismo día, algo que es imposible, ya que debe haber un período en el que se sustancia el juicio de apremio.