Entre los indicios que tendrían los investigadores del caso, el que circula con mayor fuerza es la hipótesis que involucra a un ex empleado de la multinacional que estaría haciéndole la vida imposible a Antonello, subgerente de Sistemas de la empresa alimentaria.
El sospechoso, quien ya está identificado con nombre y apellido, habría sido colaborador de la víctima y su relación personal no habría quedado del todo bien luego de la partida del presunto agresor de la compañía.
Los dos atentados
Los ataques comenzaron el pasado miércoles, cuando un "libro bomba" fue enviado a la sede administrativa de Nestlé, en la localidad de Vicente López. El artefacto, que iba dirigido a Antonello, cayó en manos de otro directivo de la empresa a quien le detonó en su escritorio.
Las cámaras de seguridad del edificio registraron el momento en que una persona se bajó de un auto dejaba el paquete en la recepción. Al parecer, el destinatario de los ataques vio de qué se trataba la temática del libro, no le interesó y lo dejó a su superior, quién sí intentó mirar sus páginas.
Ese mismo día, pero a la noche, una bomba de estruendo explotó en la casa de Ana Álvarez, ex esposa de Antonello, quien se encontraba junto a su hija en su domicilio de la localidad de Pacheco, al norte del Gran Buenos Aires. Este nuevo atentado con un explosivo de manufactura casera comenzó a orientar la investigación sobre el destinatario y sus posibles enemigos.