Las tareas, sin que se interrumpiera totalmente la circulación de trenes, se llevaron a cabo con el auxilio de grúas de gran porte para poder mover la voluminosa y pesada estructura del puente de hormigón. Los trabajos comenzaron poco después de la medianoche del sábado.
El movimiento de máquinas retroexcavadoras y de las grandes grúas, además de la presencia de numerosas cuadrillas de operarios, llamó la atención de los vecinos de la zona, muchos de los cuales se acercaron al lugar para observar de cerca los trabajos de montaje.
Entre vecinos, técnicos y operarios se observó también la presencia de funcionarios del Ejecutivo municipal, particularmente de la Secretaría de Obras Públicas.
Los trabajos concluyeron pasadas las 4 de la madrugada, cuando tras ser instalado en su correspondiente lugar el pesado puente, cuadrillas de trabajadores procedieron a instalar los durmientes, el balasto y los rieles ferroviarios para que el servicio de trenes pudiera quedar plenamente normalizado.