Según testigos, cuando pasaba por la desembocadura del río Luján el joven se arrojó a las aguas por propia voluntad como una "travesura" y comenzó a nadar.
"Le tiraron un salvavidas pero no quiso tomarlo", expresó un joven llamado Ariel, que estuvo en el lugar, a la vez que especuló con que pudo estar "alcoholizado".
Tras el episodio, intervino personal de Prefectura Naval que llevó al catamarán y al cerca de un centenar de personas que se encontraban a bordo al edificio de la fuerza en Tigre.
Una chica que también estuvo presente, aseguró que "estaba todo bien y tranquilo, y él (por el joven que se habría tirado al agua) también lo estaba pasando bien", por lo que señaló que no sabe la causa por la que se tiró al agua, y especuló que esa acción la cometió a modo de "travesura".
Varios de los asistentes fueron demorados con el fin de tomarles declaración y comenzaron a ser liberados cerca de las 9:00.
En el hecho intervino la jueza federal de San Isidro Sandra Arroyo Salgado.