Fueron 48 los jefes comunales que participaron de la reunión: hubo dos ausentes con aviso y otros cuatro que ya no son tenidos en cuenta para este tipo de reuniones, pues tienen una estrategia particular.
Se trata de los intendentes de Ezeiza, Alejandro Granados, y de José C. Paz, Mario Ishii, que tienen movimientos independientes respecto el Gobierno; y por otro lado, de los intendentes de Azul, que oficializó fuga a Cambiemos, y de San Nicolás, que suele concurrir a convocatorias que realiza el oficialismo provincial.
De la reunión solamente participaron intendentes y el presidente del PJ bonaerense, el exintendente de La Matanza, Fernando Espinoza, y allí se desplegaron las distintas posiciones que existen en el peronismo provincia, aunque todos coincidieron en destacar la fuerte señal de unidad que surgió del encuentro.
La “mesa de unidad” es una propuesta para avanzar en posiciones comunes ante “la responsabilidad de asumir un mandato histórico ante la grave situación económica y social”, y se constituirá con cuatro representantes de las dos secciones electorales que comprenden al conurbano bonaerense y dos representantes por las secciones que corresponden al interior bonaerense.
Según relataron intendentes a NA, en la reunión se expresaron las distintas miradas que hay sobre el rumbo del peronismo: los extremos los constituyeron el intendente de Ensenada, Mario Secco, quien pidió por una candidatura de la expresidenta Cristina Kirchner en las elecciones legislativas de 2017, y el de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde, referente del Grupo Esmeralda, pero más allá de eso “lo que está primando es el espíritu de unidad”.
Así, los mandatarios locales acordaron avanzar en una estrategia común de cara al tratamiento del Presupuesto, alineados para presionar por más fondos para los municipios, por lo cual ahora iniciaran una ronda de consultas con los legisladores del espacio, tanto nacionales como provinciales.
“Los intendentes peronistas de Buenos Aires decidimos integrar una sola mesa de trabajo y de unidad, para discutir y tomar las decisiones necesarias para solucionar los principales problemas de los bonaerenses. Hemos conformado una verdadera mesa horizontal de trabajo donde vamos a estar representados todos los intendentes.
Queremos y estamos construyendo un peronismo amplio, no queremos que nadie se quede afuera del peronismo”, indicó la intendenta de La Matanza, Verónica Magario, una vez finalizada la reunión.
La también presidenta de la Federación Argentina de Municipalidades (FAM) puso en segundo plano el debate sobre las candidaturas para las legislativas de 2017 y advirtió al respecto: “Los que gobernamos no estamos haciendo especulación con las posibles candidaturas para el año que viene. Nos preocupa la situación social de todos los distritos de la provincia, la pérdida de empleos, la caída de los salarios de los trabajadores por causa de la inflación y el flagelo de la inseguridad que nos golpea todos los días especialmente en el Conurbano”.
En este marco, el intendente de San Martín Gabriel Katopodis, remarcó que en la cumbre se coincidió en que “las necesidades de la gente deben ser prioridad en el Presupuesto provincial 2017”, para lo cual es necesario “que no haya endeudamiento para gastos corrientes y que los recursos se inviertan en seguridad, educación, salud y obra pública”.
Por su parte, el intendente de Esteban Echeverría, Fernando Gray, detalló que el peronismo bonaerense es “un peronismo unido, moderno, dinámico y competitivo” y destacó que los mandatarios municipales “han dado una muestra de racionabilidad y confiabilidad” a través de esta cumbre.
“Este año, los intendentes estamos muy unidos”, resumió el mandamás de Berazategui, Patricio Mussi, y advirtió que el nuevo pedido de endeudamiento que se incluyó en el Presupuesto provincial será motivo de pelea: “Seguir tomando deuda para pagar gastos corrientes, o para pagar otras deudas o para tapar otros agujeros, no es lo que sirve”, señaló.
