El caso ocurrió a las 19 de ayer en la fábrica de perfiles metálicos para la construcción situada en Reynoso al 400 de Don Torcuato, en el partido de Tigre.
A la fábrica, entraron tres delincuentes, dos de ellos armados, quienes redujeron a tres empleados y al dueño del establecimiento.
Los ladrones habían ido a buscar el dinero que estaba destinada al pago de los sueldos de los trabajadores de la empresa.
Los voceros explicaron que los hombres dominaron a las víctimas y en un momento uno de ellos tomó al hijo del propietario de la empresa, quien también trabaja allí, y amenazaron con degollarlo si no le daban la plata.
El empresario, de 51 años, reaccionó ante la amenaza contra su hijo y en una rápida maniobra logró sacar un revólver calibre 38 que tenía guardado en un escritorio.
Fue así que se enfrentó a los asaltantes y, ante la inesperada reacción, los sujetos dispararon con sus armas y se originó un tiroteo que terminó cuando uno de los ladrones cayó gravemente herido de un balazo en el abdomen, señalaron las fuentes.
Los otros dos delincuentes escaparon corriendo, mientras que las víctimas del asalto salieron ilesas.
Según confiaron los informantes, el ladrón baleado tenía 18 años y fue trasladado al hospital de la zona donde finalmente falleció por las graves lesiones que sufrió por el disparo.
Dos horas después del hecho, los familiares y amigos del joven fallecido se acercaron a la empresa para agredir al dueño de la fábrica y hasta llegaron a atacarlo a golpes de puño.
Además, las personas que se acercaron a la fábrica prendieron fuego dos autos estacionados en la firma, pertenecientes a dos operarios.
Los policías de la comisaría Tercera de Tigre, sin embargo, lograron controlar la situación y rescatar al dueño de la empresa.
Según se explicó, el hombre fue alojado en la seccional aunque más tarde recuperó la libertad ya que la justicia entendió que en el asalto había actuado en legítima defensa al disparar con su arma contra el delincuente que luego murió.
