Las llamas afectaron a todas las viviendas, en su mayoría construidas con chapas y maderas, de un conventillo ubicado en las calles Palacios y Garibaldi, conocido en la zona como el "barrio chino".
Jonathan, uno de los damnificados, indicó a radio 10 que el fuego comenzó por un cortocircuito ocurrido en la planta baja del conventillo y que rápidamente alcanzó al resto del complejo, que tenía tres pisos de altura.
"Se desplomó todo, no pudimos salvar nada de lo que teníamos. Cuando quise buscar los documentos no podía respirar por el humo negro que había", dijo el joven.
Las llamas fueron apagadas antes de que alcanzara a otro conventillo lindero al destruido y a un depósito.
Los habitantes del lugar señalaron la falta de presión de agua que había para apagar el fuego, que fue registrado por las cámaras de vigilancia situadas en los edificios más altos del centro porteño.
En el conventillo destruido vivían unas 37 personas, en su mayoría niños, comentaron los vecinos a la prensa.
El SAME, en tanto, confirmó que 14 personas sufrieron heridas leves, politraumatismos y principios de asfixia, y que cuatro de ellas fueron derivadas al hospital Argerich aunque su estado de salud no corría riesgo.
En julio de 2011, un incendio ocurrió en un hogar de tránsito situado en la calle Olavarría 900, en La Boca, causó la muerte de un bebé de un año de edad.
