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El Prefecto encontrado en Olivos recibió golpes con vida y hay dudas sobre como murió

El Prefecto encontrado en Olivos recibió golpes con vida y hay dudas sobre como murió
La autopsia al cadáver de un suboficial de la Prefectura Naval que ayer apareció en una playa de la localidad bonaerense de Olivos, determinó que recibió golpes en la cabeza cuando todavía se encontraba con vida, pero ahora resta saber si fueron provocados cuando cayó al agua o antes.
Fuentes ligadas a la investigación dijeron a Télam que la necropsia a Octavio Romero (33) fue realizada esta tarde en la morgue judicial de Lomas de Zamora, pero solo una serie de estudios complementarios y posibles testigos permitirán conocer si la víctima se suicidó, tuvo un accidente o por ejemplo, fue empujado al río.

"El cuerpo tiene contusiones en la cabeza, tanto en la frente como en la nuca, los cuales se produjeron cuando la víctima aún tenía signos vitales", explicó un vocero.

Además, del examen anatómico surgió que Romero presenta un "pulmón congestivo", esto es, con agua, es decir que respiraba cuando cayó al río.

Para avanzar en cómo se produjo la muerte, ahora habrá que realizar exámenes químicos y anatomopatológicos, entre otros, mientras que a la Prefectura Naval ya se le encargó un estudio sobre cómo estaban las mareas desde el día en que Romero desapareció hasta ayer.

Este último análisis es para saber si el cuerpo pudo ser arrastrado hasta la playa donde fue hallado ayer.

El suboficial de la Prefectura que estaba desaparecido desde el sábado último fue encontrado ayer al mediodía en una playa de Vicente López, a unos cuatro metros de la rompiente del río; boca abajo y totalmente desnudo.

Numerosos tatuajes que el hombre tenía en la espalda permitieron que fuera reconocido rápidamente por otros compañeros de Prefectura, entre ellos su jefe, mientras que luego fue identificado por su madre.

La causa de la muerte está siendo investigada por el fiscal de Vicente López, John Broyad, quien trabaja en conjunto con el juez de instrucción Juan María Ramos Padilla y la fiscal Estela Andrades de Segura, ambos de la Capital Federal.

Los dos últimos tenían a su cargo la causa por la desaparición de Romero y ayer se dirigieron hacia Vicente López para supervisar el trabajo realizado por la Policía Científica tras el hallazgo del cuerpo.

Las principales hipótesis a investigar son si el prefecto se suicidó arrojándose al río y se golpeó al caer en la zona rocosa cuando aún estaba con vida, si cayó en forma accidental o si fue empujado.

Romero, que hace 13 años que trabajaba en la Prefectura y era licenciado en Relaciones Públicas, desapareció el sábado pasado en la Capital Federal y desde entonces era buscado intensamente por familiares, amigos y compañeros de trabajo.

Según contaron sus allegados, el último contacto que tuvo con sus amigos fue cerca de las 20.30, cuando estaba en su casa preparándose para asistir a un cumpleaños, al que nunca llegó.

Los amigos declararon que a las 22.30 de ese día el celular ya estaba apagado y tampoco respondió en su domicilio, por lo que sospecharon que algo le había ocurrido y comenzaron a buscarlo.

Romero era traductor de portugués y estaba en concurso para el ingreso al Instituto del Servicio Exterior de la Nación.

Nació en la ciudad correntina de Curuzú Cuatiá y desde que se mudó a la Capital, hace 13 años, siempre tuvo a cargo a su madre y a sus cuatro hermanas.

En Buenos Aires, Romero vivía en un departamento del centro junto con su pareja, Gabriel, y planificaba su casamiento para fin de año.

En una página de la red social Facebook que se abrió para ayudar en la búsqueda, ahora solo hay mensajes de dolor por la muerte de "Tavo" que son dejados por amigos, familiares y la comunidad de la Universidad del Salvador, donde estudió y daba clases.

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