Los jueces dieron por probado que "en el transcurso de 2001 y 2002, el gerente y subgerente operativo de las sucursales del Banco de la Provincia de Buenos Aires con sede en las localidades de Alejandro Korn y Berazategui acreditó fondos de manera ilegítima en cuentas de su titularidad y de terceros, mediante asientos contables irregulares que registró en la red informática del sistema SOL con claves de acceso pertenecientes a agentes que se encontraban bajo su órbita".
Ello lo realizó "haciendo uso indebido de la potestad de modificar los códigos de acceso informático que le otorgaba su cargo, en franca violación a sus deberes de funcionario público".
El total de la maniobra sumó 19.635 pesos.
El fallo destaca que por sus "cargos y jerarquía", Baigorria tenía "la facultad -mediante su clave maestra- de modificar las claves informáticas del sistema SOL y las validaciones de las mismas en relación a los empleados bajo la órbita de su cargo".
Además, los jueces tomaron como prueba contundente que el dinero desviado fue depositado en cuentas a nombre del propio Baigorria y de un allegado.
"El hecho de que se trata constituye el delito de peculado, cometido en forma reiterada bajo la forma de delito continuado", resumieron los camaristas, al dictar la condena.
