Al salir de la Casa de Gobierno, tras casi tres horas de reunión, el prelado platense advirtió que "en los barrios, se sabe dónde se distribuye" la droga.
El arzobispo evitó criticar la política de lucha contra el narcotráfico de la administración bonaerense, pero consideró que "aquí, lo que hace falta, incluso más allá del ámbito provincial, es una decisión definitiva para paliar este flagelo".
Al actuar de vocero de la reunión, Aguer indicó que también "hemos hablado sobre las cuestiones de asistencia a los niños y adolescentes en muchos centros destinados a ofrecerles un alivio a la situación que se está viviendo, y, como se sabe, afecta a muchas familias de la provincia".
El prelado platense reveló, además, que demandaron a Scioli "una mayor rapidez en la concesión del los aportes" a la educación privada de gestión eclesial, que, aseguró, "en parte, los permiten llevar adelante este servicio".
En este sentido, Aguer recordó "un alumno en las escuelas de la Iglesia le 'cuesta' al Estado bonaerense menos de la mitad de lo que le 'cuesta' en la escuela estatal".
En tanto, el Secretario General de la Gobernación, Javier Mouriño, calificó como "fraternal" y "muy amable" el encuentro entre el Ejecutivo y los representantes de la Iglesia bonaerense, y explicó que "tomamos nota e hicimos un intercambio muy interesante sobre toda la problemática de la provincia".
El funcionario dijo que la reunión comenzó con una oración, guiada por Aguer, por la recuperación del vicegobernador Alberto Balestrini, cuyo estado de salud es grave y permanece internado.
Scioli agradeció a los representantes eclesiásticos la respuesta a la cadena de oraciones por la salud del titular del Senado provincial, realizada a instancia de la Dirección Provincial de Cultos, cuyo responsable en Enirque Moltoni.
Los prelados agradecieron también al Gobernador la reglamentación de la ley de Voluntariado Social, de especial interés para la Iglesia, mientras que Scioli entregó 31 escrituras a diversas diócesis en el marco del Programa de Regularización Dominial.
El gobernador bonaerense estuvo acompañado por buena parte de su gabinete. Además de Mouriño, participaron los ministros Baldomero Álvarez (Desarrollo Social), Eduardo Camaño (de Gobierno); Ricardo Casal (Justicia) y Mario Oporto (Educación).
A la audiencia asistieron los arzobispos Héctor Aguer (La Plata), Agustín Radrizzani (Mercedes-Luján) y Guillermo Garlatti (Bahía Blanca), junto a los obispos Rubén Frassia (Avellaneda-Lanús); Carlos Malfa (Chascomús); Juan Suárez (Laferrere); Jorge Lugones (Lomas de Zamora); Juan Puiggari (Mar del Plata); Fernando Bargalló (Merlo-Moreno); Luis Stöckler (Quilmes), Vicente Ojea (coadjutor de San Isidro) y Guillermo Rodríguez-Melgarejo (San Martín), entre otros.
