En cuanto a la participación sectorial, las nuevas radicaciones en industria alimenticia significaron 40 por ciento de las nuevas inversiones.
Asimismo, se destacó la creciente participación del sector servicios para industria, software y servicios informáticos, logística y centros de contacto, todas actividades promovidas con la nueva reglamentación vigente. La distribución regional de las nuevas inversiones resulta uniforme entre el Gran Buenos Aires y el interior, aunque en esta última zona se registra un mayor número de proyectos aunque dispersos.
Aproximadamente 75 por ciento del origen del capital es nacional, tanto que del resto de las inversiones (25 por ciento), España, Brasil, Alemania y Francia acumulan 80 por ciento de las mismas.
El ministro Martín Ferré explicó que "la Provincia no sólo atrae nuevas oportunidades productivas sino también, empresas con trayectoria que consolidan su posición, con planes de a mediano y largo plazo, elevados desembolsos y generación de nuevos puestos de trabajo".
La Ley de Promoción Industrial extiende sus beneficios impositivos desde un mínimo de 3 a un máximo de 10 años y amplía su espectro ya que en la etapa de construcción o montaje de las instalaciones industriales exceptúa del pago de Sellos a los contratos de locación de obras o servicios, suministro de energía eléctrica y de gas y seguros que cubran riesgos relacionados con igual objeto.
También durante el desarrollo de la actividad promocionada exceptúa el pago de los impuestos sobre Automotores para las pymes (hasta cinco unidades), Ingresos Brutos incluido en la facturación de los servicios de energía eléctrica, comunicaciones, gas y agua, y Sellos en los contratos de adquisición de insumos vinculados con la actividad promovida.
