El comisario no se encontraba en la casa al momento del asalto porque estaba visitando a su padre en la localidad bonaerense de Grand Bourg.
Los voceros explicaron que el robo comenzó cuando la esposa del policía, María Mallea (34), llegaba a la casa y fue sorprendida por dos delincuentes armados y vestidos de sport.
Los ladrones la obligaron a ingresar a la vivienda, donde estaban los dos hijos del matrimonio, dos amigos de éstos y una empleada doméstica de 19 años.
Todos fueron amenazados y reducidos, mientras los ladrones comenzaron a revolver todos los ambientes en busca de dinero.
En esas circunstancias, los delincuentes primero encontraron un cargador vacío de pistola y luego insignias de uniforme policial, por lo que se dieron cuenta que allí vivía un policía.
Los asaltantes comenzaron a preguntarle a la mujer dónde se hallaba su marido y a exigirle que les entregara las armas que tenía guardadas.
Fuentes policiales dijeron que los asaltantes se pusieron muy violentos al ver el uniforme y golpearon a la mujer con la culata de un arma.
"Esa situación hizo que los ladrones se pusieran muy nerviosos y actuaran más rápido y de forma violenta contra la mujer por temor a la llegada inminente del policía", dijo uno de los investigadores.
Finalmente, la mujer les entregó la pistola Browning Hi-Power calibre 9 milímetros reglamentaria de su marido, que se encontraba en un placard de la planta baja.
Los delincuentes también robaron algo de dinero, una computadora portátil, una pantalla LCD, una consola de videojuegos PlayStation 2, celulares y las llaves de la casa y del auto de la mujer.
Los delincuentes escaparon en una camioneta Renault Express blanca en la que, según se sospecha, los esperaba al menos un tercer cómplice.
Como jefe de operaciones de Drogas Ilícitas de Quilmes, el comisario Rodríguez está a cargo de encabezar los operativos y allanamientos antidrogas de realizados en esa zona del sur del conurbano.
Un vocero de la investigación aseguró: "Más allá del cargo que tiene Rodríguez en la fuerza, escartamos que este robo esté vinculado a sus actividades como policía".
"Está claro que se trató de un robo al voleo y que los ladrones se dieron cuenta de que habían entrado a la casa de un policía cuando encontraron el cargador y las insignias policiales", señaló la misma fuente.
El caso es investigado por la fiscal Beatriz Molinelli, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1 de Vicente López Oeste.
La fiscal ordenó la intervención de la Policía Científica para que busquen huellas y rastros que puedan llegar a identificar a los autores del hecho.
