Los datos surgen luego de que efectivos de la Gendarmería Nacional culminaron esta madrugada con los 110 allanamientos que iniciaron ayer en distintos puntos del país por orden del juez federal porteño Norberto Oyarbide.
Voceros de la fuerza informaron que se sospecha que los 40 detenidos formaban parte de "una organización que se dedicaba a la adulteración de documentos públicos para la venta de futbolistas al exterior". Tal como se conoció ayer, los detenidos trabajaban en estudios jurídicos y contables, gestorías y escribanías, pero este sábado se agregó que también formaban parte de la red imprentas y casas de fotocopiadoras que colaboraban en las maniobras.
De esos lugares, los 600 gendarmes que intervinieron en los operativos se incautaron de matrices y sellos de comunas italianas y del consulado, 60 computadoras, pasaportes, documentos de identidad, dinero y armas de fuego. Un dato que llamó la atención a los investigadores es que la mayoría de las que intervenían en esta red eran mujeres, quienes con el resto de los detenidos fueron alojados en la Unidad Especial de Procesos Judiciales de Gendarmería y entre este domingo y el lunes serán indagados por el juez.
En tanto, uno de los operativos concretados ayer se realizó en el club Independiente, ubicado en la localidad bonaerense de Avellaneda, donde los gendarmes buscaron documentación relacionada con el pase de jugadores a Italia. Uno de los últimos transferidos por ese club fue el delantero Germán Denis, quien desde junio forma parte del plantel del Nápoli.
Por otra parte, el cónsul italiano en Buenos Aires, Giancarlo Curcio, dio a entender que el ex arquero de River Juan Pablo Carrizo, transferido al Lazio, es uno de los jugadores investigados por la Justicia.
"El año pasado, él presentó documentación, no fue aceptada en Italia, pero ahora está jugando allá como argentino, esto significara algo, no?, se preguntó en declaraciones a radio Mitre. Curcio aseguró que el futbolista "hace unos días se fue a Italia como ciudadano argentino, con visa, pero si hubo una actuación de mala fe habrá que ver".
El año pasado Carrizo fue comprado por Lazio, pero cuando viajó a Italia para incorporarse al club no logró la doble ciudadanía para incorporarse como comunitario y debió regresar a River, a préstamo. Ahora, el arquero se sumó al plantel del club italiano, pero ocupa una plaza como extranjero. Una de las sospechas de los investigadores es que algunas gestorías y estudios se dedicaban a emitir los pasaportes falsos para que muchos jugadores de fútbol que no tienen ascendientes italianos pudieran acceder a esa nacionalidad y convertirse en jugadores comunitarios. Es que a muchos futbolistas que son contactados por clubes europeos se les exige tener la doble ciudadanía antes de ser contratados, ya que los equipos tienen un cupo limitado de jugadores extranjeros para que formen parte del plantel.
La causa comenzó en noviembre pasado a raíz de una denuncia presentada por el cónsul Curcio, quien detectó en algunos pasaportes su firma y algunos sellos habían sido falsificados. La maniobra involucra especialmente a jugadores de fútbol, pero también hay ciudadanos que quisieron sacar la doble ciudadanía italiana para ir a vivir a Italia.
Las gestorías que hacían los trámites y fueron allanadas ayer se ubicaban en Capital Federal, San Isidro, Quilmes, Morón, La Plata, San Martín, Mercedes, Campana, Lomas de Zamora, Pinamar, Mar del Plata, Santa Fe y Reconquista. También se buscó documentación en las instalaciones del Club Atlético Lanús, el Registro Civil porteño y el de Santa Fe y el domicilio de la familia del juvenil de Boca Juan Forlín.
